El deficit de vitaminas y minerales pueden afectar los tejidos de la boca. A continuación una sintesis de dichos efectos.
Vitamina A: Su deficit causa atrofia de los ameloblastos y destrucción periodontal acelerada.
Riboflavina: Su deficiencia causa queilosis angular, sensación de lengua quemada, mucosas coloreadas azul o púrpura.
Vitamina C: Su carencia se asocia con atrofia odontoblastica, lenta cicatrización de las heridas.
Vitamina K: Su escasez provoca hemorragia gingival.
Zinc: Su carestía conduce a engrosamiento del epitelio oral y gusto alterado de la lengua.
Calcio: Su carencia puede causar perdida osea alveolar.